Galway, la ciudad más importante de la costa oeste del país y la tercera en importancia por detrás de Dublín y Cork, ofrece muchos alicientes para los estudiantes que están haciendo un curso de inglés en Irlanda.

Referencias a España

Tal vez una de las cosas que más llaman la atención a los que visitan esta ciudad por primera vez es la cantidad de referencias que hay a España: el Spanish Arch, la Spanish Parade, “custodiada” por una estatua de Cristóbal Colón… Se trata de reminiscencias del pasado de Galway, en su día un importante puerto en el que anclaban muchos pesqueros españoles que transportaban principalmente vino y brandy.

Mucho por descubrir

Otro de los atractivos que pueden encontrar los que pasan su verano en Irlanda y visitan esta ciudad es la casa-museo de Nora Barnacle, la esposa de James Joyce, nacida en Galway y que alberga, entre otros objetos que hacen las delicias de los seguidores del autor de “Ulises”, la intensa correspondencia que se intercambió la pareja y entre la que se encuentran las famosas “dirty letters” (cartas sucias). Uno de los monumentos más visitados durante el verano en Irlanda se encuentra en esta ciudad: se trata del castillo de Lynch, para muchos es el mejor de los muchos que se pueden encontrar a lo largo de la geografía irlandesa. Entre los grabados de su fachada destacan unas fantasmagóricas gárgolas y un amplio repertorio de escudos nobiliarios.

La Iglesia de San Nicolás (St Nicholas Collegiate Church) es otro de los puntos de interés de la ciudad, tanto por su importancia (se dice que Cristóbal Colón estuvo en ella en 1477 documentándose sobre los viajes del monje San Brendan, del que se cuenta que ya había viajado a América en el siglo VI) como por el hecho de que en su entorno se celebra todos los sábados un famoso mercado que no hay que perderse.

Los amantes de las “pintas” de cerveza irlandesa no pueden dejar de visitar el Ua Neachtáin, el pub más antiguo de la ciudad y uno de los favoritos tanto de los turistas como de los “galwegians” locales. Una de las estampas más típicas de Galway que se queda grabada en la retina de todos aquellos que se han decantado por esta ciudad para realizar un curso de inglés en Irlanda es la que ofrece el puente Salmon Weir, en el que se puede ver a los salmones “en estado puro” y a un buen número de pescadores en la orilla.

El barrio de Cladagh, la imponente University College, el museo de la ciudad o la catedral de San Nicolás (conocida por los lugareños como el Taj Mahal) son otras sorpresas que sorprenden a los visitantes que pasan el verano en Irlanda. Y para los amantes del paisaje, un dato a tener en cuenta: Galway es un excelente punto de partida para descubrir las impresionantes tierras de Connemara o visitar las famosas islas Aran.